La restauración del único mural sin carácter político que pintó David Alfaro Siqueiros concluyó a tiempo para la inauguración en su nuevo emplazamiento de Buenos Aires durante la celebración de la XX Cumbre Iberoamericana en la capital argentina. Un equipo de 40 expertos locales y mexicanos trabajó durante más de cuatro meses para recuperar una obra que fue víctima de la humedad y el abandono durante 17 años en un almacén de las afueras de la ciudad porteña.El mural "ha resistido todo tipo de agresiones" y, "para sorpresa de todos, sólo tenía entre un 3 y un 5 por ciento de deterioro", según explicó el especialista mexicano Manuel Serrano, que dirigió el proyecto de recuperación. Trabajó con todo su equipo en un cobertizo levantado junto a la Casa Rosada, residencia de la presidenta argentina, que ordenó su traslado a ese lugar para que fuera restaurada.
La obra se titula ‘Ejercicio Plástico’ y fue pintada por Alfaro Siqueiros en 1933, cuando experimentaba con una técnica que acabaría convirtiéndose en la más utilizada por el pintor a partir de entonces. La realizó con ayuda de los artistas argentinos Antonio Berni, Juan Carlos Castagnino y Lino Enea Spilimbergo en una finca a la afueras de la capital argentina, donde fue deteriorándose poco a poco hasta que se restauró por primera vez en 1962.
‘Ejercicio Plástico’ está compuesto por figuras distorsionadas de desnudos femeninos que se extendían por las paredes, el techo y el piso del sótano de la casa donde se pintó. Su objetivo es que el espectador crea que se encuentra sumergido en el agua donde las mujeres nadan.
En 1989, el restaurador Héctor Mendizábal compró la finca donde estaba el mural para desmontarlo y exhibirlo al público, tarea que se concretó con la extracción de siete paneles. Pero la falta de fondos derivó en la quiebra de la empresa y Mendizábal tuvo que hacer frente a un aluvión de demandas iniciadas por sus antiguos socios, que reclamaban la propiedad del mural.
Fue en octubre de 2008 cuando la valiosa pintura fue trasladada a las puertas del Palacio Presidencial de la República Argentina desde el aparcamiento al aire libre donde permaneció abandonado durante dos décadas. La presidenta Cristina Fernández salió a recibirlo personalmente y a continuación lo entregó a los expertos del Instituto Nacional de Bellas Artes de México y de la universidades argentinas de San Martín y Tecnológica Nacional, que se encargaron de restaurarlo.
El profesor Serrano asegura que la recuperación fue total gracias a la calidad de los materiales utilizados por el artista. Tanto la estructura como la resina y el rebote del aplanado se encontraban en perfectas condiciones, por lo que el material llegado desde México para hacer trabajos de consolidación regresó intacto a su origen. Según el experto mexicano, "éste es uno de los trabajos que han marcado" en su vida "un antes y después".
‘Ejercicio plástico’ fue declarado bien de interés histórico artístico nacional por el Gobierno argentino en 2003 y México lo considera también monumento artístico de la Nación, por lo que ambos países están interesados en au preservación. La presidenta Cristina Fernández declaró durante la ceremonia de inauguración del nuevo museo del Bicentenario de la República Argentina que “éste es un verdadero patrimonio cultural para argentinos y mexicanos, una obra de amor y un puente de amistad entre mexicanos y argentinos”. Felipe Calderón, Su homólogo mexicano, agradeció a la presidenta Fernández de Kirchner “el haberse ocupado de esta obra grandiosa”, durante el acto oficial.
El mural de Siqueiros está valorada en 2,5 millones de euros, según los especialistas, pero el gobierno argentino tuvo que superar un litigio sobre su propiedad con los herederos del empresario que encargó la obra a su autor. Autoridades y descendientes de Natalio Botana no fueron capaces de ponerse de acuerdo sobre la cantidad que éstos debían recibir por la expropiación de la obra de Arte.
El Gobierno de México invirtió también en el proceso de restauración más de 100.000 euros con cargo a los presupuestos del Instituto Nacional de Bienes Culturales y de la Secretaría de Relaciones Exteriores. La parte argentina no ha querido revelar el monto de sus aportaciones.
Ahora el mural de Siqueiros se expone al público en el recinto de la antigua aduana de Buenos Aires, junto a la residencia oficial de la presidenta de la República. Se puede ver en pequeños grupos, de la misma manera que cuando fue diseñado, aunque no está bajo tierra, para evitar problemas de humedad. (fuente: arteseleccion.com)
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